Ciudad de México, 11 de octubre de 2017
TRANSCRIPCIÓN DE LA SEGUNDA INTERVENCIÓN DEL DIPUTADO ARMANDO ALEJANDRO RIVERA CASTILLEJOS, DURANTE LA REUNIÓN DE TRABAJO DE LA COMISIÓN DE HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO CON EL SECTOR PRIVADO, ACADÉMICO Y SOCIAL, COMO PARTE DEL ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DEL PAQUETE ECONÓMICO CORRESPONDIENTE AL EJERCICIO FISCAL DE 2018, EN EL SALÓN PROTOCOLO, EDIFICIO C
DIPUTADO ARMANDO ALEJANDRO RIVERA CASTILLEJOS (AARC): Muchas gracias Presidenta.
… con los organismos en la mañana, nos lo presentaron el año pasado, cuando se revisaba la Ley de Ingresos, creo que es cierto y nadie puede negar que hay un problema de obesidad y de diabetes, o sea, ese es un hecho, lo que a mí todavía no me queda claro --y lo pedí desde el año pasado y ojalá usted me lo pudiera hacer llegar— es qué correlación hay entre los impuestos –que para mí es recaudatorio este tipo de impuesto— con el lograr bajar el objetivo, que es que haya menos obesidad y menos diabetes.
Uno pudiera pensar en teoría económica que obviamente al aumentar los precios, vía cualquier forma y los impuestos son una vía de aumentar el precio, pues debería bajar el consumo, eso nos dice cualquier economista; sin embargo, después de tres o cuatro años de haber implementado este impuesto, ¿cuáles son los hechos?, yo no veo que baje el consumo de productos de alto contenido calórico.
También creo que hay una mala aplicación del gasto, en esta comisión es donde nosotros solamente hacemos el análisis de la Ley de Ingresos; el Presupuesto de Egresos se ve en la Comisión de Presupuesto de esta Cámara --algunos de nosotros somos integrantes en ambas comisiones-- pero también puedo decir que no creo que esté bien aplicado, de hecho hay metas que se negociaron cuando se implementó esto, como el de los bebederos en escuelas, a mi juicio, basados en un mal diagnóstico pusieron números alegres sin saber si había potable en las escuelas o tuberías porque todavía tenemos escuelas en este país que no tienen agua para los baños.
Entonces habría que hacer un diagnóstico más eficiente y certero de cómo se va a gastar o cómo se gasta este ingreso, pero específicamente para el tema que nos ocupa ¿hay alguna evidencia real, probada, de que al aumentar los impuestos, disminuya el consumo en este país? Porque ya llevamos tres o cuatro años haciéndolo. Muchas gracias.
ALEJANDRO CALVILLO, DIRECTOR DE LA ORGANIZACIÓN EL PODER DEL CONSUMIDOR (AC): Sí, los estudios científicos, publicados en revistas científicas, avaladas por pares, que incluso esos estudios han estado revisados por un panel internacional de expertos muy reconocidos a nivel internacional, indican que hay una reducción de 6 por ciento en el consumo en el primer año, en 2014 y de 9 por ciento en el 2015.
Los datos—y ustedes pueden ver los propios datos de Anprac, las contradicciones que hay en la página de Anprac, en la Asociación Nacional de Productores de Refrescos—si ustedes van a los datos que vienen de los informes de la industria manufacturera, incluso este año tuvieron una caída y salió la industria a decir: no, es la primera vez porque siempre han estado aumentado.
Si ustedes ven los datos ahí tienen caídas en 2014 y 2015, tienen un aumento en 2016 en datos de Inegi, porque ellos están utilizando lo que están pagando de impuesto, pero vayan a los datos de Inegi, ese aumento que tienen en 2016 está muy por debajo del aumento de la población y ustedes lo saben, los datos brutos no te sirven si no tienes las variables que tienes que tener.
Los propios estudios pagados por la industria que no han sido publicados en ninguna revista científica, no han sido revisados por pares, que van contra el impuesto, sí, los estudios 2014 se ajusta el que pagó Femsa, la Universidad Autónoma de Nuevo León, que decía que nada más había bajado 4 por ciento, pero no habían tomado las bebidas azucaradas que no son gaseosas o que son como néctares que también tienen impuesto, si se ajustaban se llegaba al mismo número de 6 por ciento.
Entonces ha tenido un efecto, pero obviamente decimos que es un impuesto a medias, nuestra recomendación era 20 por ciento y lo vamos a ver y en el mundo esto viene.
No sé si les llegó este documento, traigo aquí copias, ahorita se los vamos a hacer llegar –si me pueden ayudar a dárselos a los diputados— ahí van a poder ver cómo el impuesto está surgiendo y yo nada más cierro con esto --porque sé que vamos atrasados--.
Se puso ese impuesto a las bebidas de 10 por ciento, que un peso, más o menos 10 por ciento; de 8 por ciento a los alimentos ultraprocesados ¿han ustedes visto alguna campaña en contra del impuesto a los alimentos ultraprocesados con alto contenido calórico? Nadie, ninguna empresa está protestando, por qué están protestando y hay toda esa campaña en contra de las bebidas azucaradas, por qué?
Les pido que ustedes abran ese documento y se vayan a una tabla que está en el número 6 y ese es un documento interno de la mayor empresa de bebidas azucaradas en el mundo, donde la Directora de Europa de esta empresa circula un documento donde dice cuáles son las políticas que más pueden afectar sus ventas y son más viables y el extremo derecho arriba están los impuestos, el mayor miedo que tienen estas empresas es a los impuestos, porque saben que si los impuestos son de la magnitud que se recomienda, va a tener un efecto y eso va a empezar a cambiar los hábitos.
Así como ahora vamos a una fiesta particular y para fumar la gente se sale y no lo hace dentro, porque asumió eso, la diferenciación, lo que tenemos que lograr es que la gente, estas mismas empresas tienen bebidas que no tienen impuestos, que no les está afectando el impuesto y son las principales comercializadoras de agua embotellada que han hecho el gran negocio de este sismo, si hay una empresa beneficiada por esto, son ellas y no han llevado agua gratuita a ninguna comunidad, incluso han puesto máquinas para expender botellas de agua.
Entonces el impuesto funciona, el impuesto tiene que subirse y es una desgracia en verdad, la política, la única política contra esto ha venido del sector de Hacienda; del sector Salud aquí no ha venido nada.
AARC: Solamente para concluir, por qué insistir en un peso, si la recomendación es en porcentaje, porque esto pasa, pasó con el impuesto sobre el tabaco, pasa con ustedes, si es recomendación de porcentaje, porque los precios aumentan año con año, en lugar de poner cuota fija, por qué no ponerle un porcentaje.
AC: Se mejoró el caso del tabaco, el tabaco no está indexado a la inflación. Este caso de un peso está indexado, entonces, cuando ya la inflación sube 10 por ciento –que ese ya es el acumulado que hay en este año—tiene que ajustarse para el año que viene. Entonces sí está así.
Nos referimos 10 por ciento, sería más o menos se sigue con la inflación. Entonces la recomendación serían 2 pesos, que sería como el 20 por ciento.
Muchas gracias.
--ooOOoo--
MRA