Ciudad de México, a 28 de noviembre de 2022

TRANSCRIPCIÓN DE LA INTERVENCIÓN DE LA DIPUTADA MARÍA ELENA PÉREZ-JAÉN ZERMEÑO, DURANTE LA REUNIÓN DE TRABAJO DE LAS COMISIONES UNIDAS DE REFORMA POLÍTICO-ELECTORAL, PUNTOS CONSTITUCIONALES; Y GOBERNACIÓN Y POBLACIÓN DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS.

DIPUTADA MARÍA ELENA PÉREZ-JAÉN ZERMEÑO (MEPJZ): Buenas tardes a todos los integrantes de las Comisiones Unidas presentes.

A pesar de que los diputados oficialistas y aliados saben que la reforma electoral enviada por el Presidente López Obrador no va a pasar, no la vamos a aprobar, no les dan los números, insisten en presentar un dictamen sobre la iniciativa sin cambios.

Y lo hacen pretendiendo engañar una vez más a los mexicanos, por eso quieren llevar al Pleno un debate donde, si bien todos tenemos derecho a expresar nuestros puntos de vista, ustedes echan mano, ojo, echan mano del más falso de sus argumentos, la “supuesta austeridad republicana”, y lo hacen con el fin de desaparecer las instituciones que nos han costado décadas construir, esas instituciones que han permitido a las familias mexicanas vivir en democracia; y ahora vienen con la falacia de que la democracia es cara, vaya despropósito.

Dispendio, dispendio lo que ustedes hacen, ayer nos volvieron a dar ejemplos, la “marcha del dispendio”.

Les recuerdo que algunos legisladores de Morena y otros que ahora ocupan puestos en la Administración Pública Federal, incluido el Presidente López Obrador, participaron en la lucha por lograr instituciones confiables y transparentes. Les refresco la memoria: el 6 de julio de 1988, millones de mexicanos acudieron a emitir su voto, el nivel de participación fue de 50.4%; sin embargo, el resultado de las elecciones de Presidente de la República, senadores, diputados y asambleístas no se dio a conocer esa noche, sino hasta una semana después, lo que despertó muchas especulaciones.

Yo sí me acuerdo. Si se acuerdan ustedes que la Comisión Federal Electoral, que organizó las elecciones en 1988 falló, ni las normas, ni las insituciones, ni los operadores ofrecían garantías de imparcialidad.  ¿Sería porque el presidente de esa Comisión Federal Electoral era el secretario, el entonces secretario de Gobernación, Manuel Bartlett Díaz? Sí, el mismo que ahora forma parte de este gobierno morenista y que se desempeña como director de la Comisión Federal de Electricidad.

Los candidatos presidenciales, recuerden, Cuauhtémoc Cárdenas, Manuel Clouthier y Rosario Ibarra acudieron a las oficinas de la Secretaría de Gobernación para denunciar anomalías en los comicios, y en los días posteriores se unieron para denunciar un fraude electoral y realizaron varias protestas.

La respuesta a este desaseo y la exigencia fue la creación del Instituto Federal Electoral, hoy INE, un Instituto que nació en 1990 y que desde 1996 es plenamente autónomo, es decir, no alineado con ninguno de los competidores ni con ningún gobierno. Esto es lo que ha hecho posible elecciones competidas, alternancias en todos los órdenes de gobierno, congresos plurales, expansión de las libertades.

Recuerden diputados que se dicen de izquierda, hace 50 años no existía un órgano político independiente del gobierno que organizara las elecciones y realizara el conteo de votos. Tristemente para todos los mexicanos; el Presidente López Obrador, Morena y sus aliados quieren regresar a esa época disfrazando la desaparición del INE con un supuesto “ahorro” que significaría perder nuestros derechos electorales.

Déjenme darles solo un dato para mostrar su supuesta austeridad. Al revisar el Presupuesto de Egresos de la Federación aprobado para este año, encontramos que el INE cuesta 19 mil 700 millones de pesos, el Tribunal, 2 mil 700 millones de pesos; sumando ambos montos nos dan 22 mil 400 millones de pesos, sin embargo, la Comisión Federal de Electricidad recibió un subsidio de 68 mil 800 millones de pesos solamente de enero a septiembre de este año, es decir, 46 mil 400 millones de pesos más que el INE y el Tribunal juntos. Hay visión corta, ¡eh!

Por todo ello, en Acción Nacional votaremos en contra de la destrucción del Instituto Nacional Electoral, en contra de que atenten contra las instituciones democráticas de nuestro país, especialmente las autónomas y en contra de que terminen con nuestros derechos democráticos que hemos construido por décadas.

Llámenle como quieran, llámenle como quieran, pero al suprimir, quieren destruir al INE.

Desaparecen su Consejo General, desaparecen el servicio profesional de carrera, le quitan el control del listado de electores. Eso, señores, es desaparecer al INE, disfrazándolo.

La realidad es que quieren desaparecerlo porque el gobierno de López Obrador quiere controlar las elecciones e inclinarlas hacia donde le conviene.

No lo vamos a permitir, el Grupo Parlamentario de Acción Nacional votaremos en contra. Estamos aquí para defender la democracia.

Les recordamos, el INE no se toca, señores.

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